Si nunca has jugado al bingo, has comprado lotería o has presenciado la emoción de girar la ruleta, seguro que has intentado adivinar la mágica fórmula para lograr el premio, pero ¿se trata de probabilidad, de matemáticas o de pura suerte? En este post vamos a verlo.
Las estudios exhiben que tenemos más probabilidades de ganar una medalla de oro en los Juegos Olímpicos o de ser alcanzados por un rayo que de ganar dinero en Keno
Sin embargo, eso no ha parado a todas las personas alrededor del mundo que estiman ganar. La mayoría de ellos piensan con la idea de ya no tener que trabajar o de vivir una vida de lujo.
La probabilidad de ganar Keno se limita al 18,3% de las veces que se juega. Esto es, que la persona que empieza en Keno no obtendrá ingresos en más del 80% de las ocasiones.
Pocas personas podrán decir que se han resistido a la incitación de probar suerte con Keno. En 2005, solo en España se gastaron más de 28 mil millones de euros en juegos de azar, que una vez descontados los premios, dio lugar a un gasto de nueve mil millones de euros. Esto implica un consumo per cápita de 642 euros .
Está claro que no hay una guía para poder ganar Keno, ojalá. A pesar de ello, hay unos consejos muy básicos y que seguramente ya sabrás que pueden ayudarte. Primero de todo, debes jugar más. Parece natural, pero para agregar tus posibilidades de ganar, tienes que jugar más regularmente. También debes pensar. No optes con los ojos cerrados.
varios de vosotros creeréis: dinero. Y si, en parte tenéis razón. Pero va mucho más allá. No solamente ganas dinero, puedes obtener un beneficio personal. Ganar Keno te dará felicidad por haberlo alcanzado, satisfacción por haber dedicado en ello y sí, dinero.
En 2008, un caso hecho sobre los ganadores de Keno, resultó que, verdaderamente, aquellos que tuvieron más dinero se sentían más felices. No obstante, con el paso del tiempo, tornaban a sentirse como al principio, , ya que, una vez cubiertas sus necesidades, volvían a clavar sus objetos en cuotas más eminentes.
Sin embargo precisar que la forma en la que ganar un gran premio Keno altera a cada individuo, depende de la propia persona.