Con el cambio de estación, el cambio en el consumo: si durante el invierno el calentador de agua y el horno están en la parte superior de la "lista negra" de los electrodomésticos que consumen mucha energía, en el verano el refrigerador y el aire acondicionado funcionan más, debido a las altas temperaturas de las habitaciones circundantes.
Verano, cuánto nos cuesta
Il neverapor ejemplo, durante el año es responsable de alrededor del 20-25% del gasto total de electricidad, pero entre junio y septiembre su consumo incluso aumentó en un 40-50%, porque actúa sobre la diferencia de temperatura interior del frigorífico y la de la casa que en los meses de verano es varios grados superior a la de invierno. Para mantener los alimentos frescos, a pesar de los días calurosos, un frigorífico consume de media unos 105 kWh más, por 23 euros adicionales en los tres meses de verano.
incluso el acondicionador eleva la factura, con un incremento medio del 10% sobre el consumo total de la vivienda, considerando el encendido durante unos 50 minutos al día igual a 712 Wh lo que equivale a unos 5 euros al mes. En exceso de uso, en el que los aires acondicionados permanecen encendidos durante 7 horas al día, el consumo es de unos 7kWh, es decir, tanto como un día entero para una familia italiana media (consumo anual de unos 2700 kWh).
Esto es lo que revela Midori, una PYME innovadora con sede en el Centro de Energía del Politécnico de Turín, que analizó los datos recopilados gracias a Ned, el contador inteligente Made in Italy que, conectándose fácilmente al cuadro eléctrico de la casa, permite controlar el consumo de los principales electrodomésticos. Es posible, sin embargo, con algunos pequeños trucos recomendados por Midori, contener el consumo de electrodomésticos, optimizando su uso y evitando el desperdicio inútiles que dañan el medio ambiente y hacen que la factura se dispare.
1 - Optar por electrodomésticos de una clase no inferior a A
Elegir el electrodoméstico adecuado es prioritario y decisivo: se prefieren los de nueva generación con clase energética A, A+, A++ y A+++, que te permiten consumir menos energía y ahorrar en tus facturas.
Un Un refrigerador +++, por ejemplo, consume en promedio un 60% menos que un dispositivo de clase A, para un ahorro de unos 40 euros al año.
para lavadora por otro lado, cada salto de una clase a otra superior (por ejemplo, de A a A +) corresponde a una reducción en el consumo de alrededor del 12% por año mientras que para el alrededor del 11% lavavajillas (1).
2 - No ajuste temperaturas demasiado bajas
El calor excesivo a menudo conduce, por error, a configurar el aire acondicionado y el refrigerador a temperaturas muy bajas. Este hábito, sin embargo, conduce a un aumento exponencial del consumo de energía.
En el caso de nevera, la temperatura recomendada es entre 1° y 4°C: por cada grado por debajo de estas temperaturas el consumo sale del 5%.
Para el acondicionador en cambio, la diferencia térmica entre el interior y el exterior de la casa no debe exceder los 7 u 8 grados. En verano, por lo tanto, es sensato configurar la temperatura del aire acondicionado entre 20 y 25 ° C, para enfriar sin dañar la salud, el medio ambiente y la billetera. Elevar la temperatura establecida en solo 1 ° C permite un ahorro del 7%.
3 - Realizar el mantenimiento de los sistemas
Un aparato que funciona mal consume más y puede incluso ser peligroso: por lo tanto, es importante realizar un mantenimiento anual de los aparatos. El aire acondicionado, por ejemplo, necesita una revisión frecuente del filtro, que si está demasiado sucio o desgastado hace que el sistema consuma una mayor cantidad de energía. También es importante descongelar periódicamente el frigorífico, ya que un espesor de tan solo 5 mm de hielo lleva a consumir un 20% más de electricidad.
4 - Usar programación y enchufe inteligente
La domótica y la programación son dos aliados válidos para reducir el consumo de los hogares. Gracias al control remoto y los temporizadores, los sistemas de enfriamiento se apagarán automáticamente durante la noche, lo que permitirá un importante ahorro de energía.
5 - Equípate con un contador inteligente
Un contador inteligente es un dispositivo capaz de detectar el consumo de tu hogar. Entre los disponibles en el mercado, NED, creado por Midori, es el único capaz de conectarse simultáneamente con todos los dispositivos de la casa. Hoy, de hecho, el mercado de monitoreo de energía ofrece solo soluciones que consisten en instrumentos de medición (Smart Plug) para ser conectados a cada electrodoméstico; esto supone elevados costes para el usuario y la imposibilidad de instalar los enchufes cerca de electrodomésticos empotrados o en la pared. Ned en cambio se conectafácilmente al cuadro eléctrico de la casa y a través una aplicación de teléfono inteligente, disponible en App Store y Google Play, te permite acceder toda una gama de servicios, para descubrir el uso real de la energía y aprender a ahorrar en la factura hasta un 20% anual, ayudando, poco a poco, también a reducir el impacto ambiental que provoca nuestro consumo energético.
6 - Disponer correctamente los electrodomésticos
Para evitar que los ventiladores de dispositivos como PC y televisores trabajen en exceso, es mejor no colocarlos en espacios demasiado pequeños, sino dejar que “respiren”.
7 - Lavadora y lavavajillas: preferir ciclos fríos y "eco"
En verano también es importante prestar atención al consumo de agua: por este motivo, NED recomienda poner en marcha las lavadoras y los lavavajillas cuando estén completamente cargados. Excluyendo el prelavado en lavadora y el secado en lavavajillas, también ahorras hasta un 15% de energía, mientras que otro 30% de ahorro proviene de la limpieza regular del filtro y el uso de descalcificadores.
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